"No tengo mucho tiempo para mis hobbies, pero suele ser sacar fotos y jugar al pádel", resaltó Sofía Giménez. Y añadió: "Lo elegí porque me descarga energía acumulada".

"Aiyana Queen" (como le gusta que la llamen) contó que se encontraba conociendo a alguien, pero "no funcionó". Si bien este toleraba que sea escort, tampoco era que le "gustaba mucho". Por lo tanto, al momento en que está publicada esta nota, ella todavía se encuentra soltera en este mundo.

Por otra parte, se dio el gusto de contar una anécdota chistosa: "Siempre con mis clientes nos encontramos en los hoteles y, para entrar en confianza, hablamos de lo cotidiano. Yo dialogaba y, en un momento, me doy cuenta que lo hacía sola. Lo miro, y me hace seña que era sordo mudo. Por ende. nunca escucho nada de lo que dije", dijo Sofía entre risas.

Giménez subrayó que su familia sabe del trabajo que lleva adelante, y remarcó que no se ha encontrado con prejuicios de la labor de escort, del cual "no debería haber tampoco". "No me importa mucho las opiniones de los demás. Mientras haya demanda", aseveró a NOVA.

Más allá de su abultada carpeta de clientes que van desde ingenieros hasta contadores, para su cuidado personal no va al gimnasio. Afirma que el secreto de ella está en mantenerse con un baño relajante, una película mientras se cena y desconectar por completo del teléfono celular.