En sus recuerdos, no se desvanecen las imágenes de la precariedad con la que combatieron y la dureza del conflicto. "Fuimos uno de los regimientos que más bajas tuvimos", relata Álvarez, quien aún recuerda el impacto de una bomba que los hizo volar por los aires durante los bombardeos finales del conflicto​

Sin embargo, la batalla de Álvarez no terminó en las islas. Tras la rendición, al regresar a Argentina, él y otros soldados enfrentaron el olvido y la marginación.

Durante los primeros años, la sociedad y el Estado se distanciaron de los veteranos, un fenómeno conocido como "desmalvinización". Álvarez, junto a otros ex combatientes, luchó para revertir esta indiferencia, reclamando derechos básicos como acceso a servicios de salud y reconocimiento social​

Hoy, Álvarez es una voz incansable en la reivindicación de la causa Malvinas. Bajo su liderazgo en el Centro de Ex Combatientes, ha promovido la memoria y el respeto hacia los héroes de guerra, logrando que escuelas y espacios públicos lleven su nombre.

Álvarez considera fundamental transmitir estas historias a las nuevas generaciones, destacando que la causa Malvinas representa una "idea de Patria que nos incluye a todos"​

A lo largo de su vida, Fernando ha enfrentado desafíos personales y sociales, pero su misión sigue firme: mantener viva la memoria de sus compañeros caídos y garantizar que nunca se olviden los sacrificios que realizaron por el país.